Redacción Invertix
El reciente conversatorio encabezado por el ministro de Hacienda y Economía, Magín Díaz, en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), reafirmó el consenso sobre la fortaleza de los fundamentos macroeconómicos de la República Dominicana, incluso en un entorno global marcado por desaceleración y tensiones geopolíticas.
Durante el encuentro con representantes del sector empresarial, académico y social, el funcionario destacó que la economía dominicana mantiene un equilibrio notable entre crecimiento, estabilidad de precios y sostenibilidad fiscal, factores que la colocan entre las más resilientes de América Latina.
Calificación crediticia y riesgo soberano
Díaz subrayó que el país avanza hacia el objetivo de alcanzar el grado de inversión, apoyado en una política fiscal responsable y un manejo prudente de la deuda pública. Como muestra de ese progreso, Moody’s Ratings elevó en agosto de 2025 la calificación soberana de “Ba3+” a “Ba2” con perspectiva estable, la primera mejora desde 2017.
El ministro resaltó que el riesgo país medido por el índice EMBI se encuentra en mínimos históricos, reflejando la confianza de los mercados internacionales. Este desempeño se complementa con un sistema financiero sólido, altos niveles de liquidez y reservas internacionales que superan los US$13,000 millones, fortaleciendo la posición externa del país y su capacidad de respuesta ante choques globales.
Política fiscal y dinamismo de la inversión
La reformulación presupuestaria de 2025 prioriza un incremento de la inversión pública como motor de reactivación. Según Díaz, la estrategia fiscal busca combinar expansión de la infraestructura con disciplina en el gasto, manteniendo el cumplimiento de la regla fiscal.
La inversión extranjera directa, que alcanzó US$4,800 millones en el último año, refuerza la confianza de los inversionistas en la sostenibilidad del crecimiento y en el marco macroeconómico estable. Este flujo, junto con las exportaciones, el turismo y las remesas, sostiene el ingreso de divisas y la estabilidad cambiaria.
Indicadores sociales y sostenibilidad del crecimiento
El ministro también destacó las mejoras en los indicadores sociales, con una reducción sostenida de la pobreza general desde 34.8 % en 2016 a 19.0 % en 2024, y de la pobreza extrema de 5.9 % a 2.4 % en el mismo período. El Índice de Desarrollo Humano y el ingreso nacional bruto per cápita muestran una tendencia similar, reflejando los efectos del crecimiento económico sobre las condiciones de vida.
Pese a los desafíos globales derivados de la pandemia, los conflictos bélicos y la inflación internacional, la República Dominicana ha preservado la estabilidad de precios, la solvencia del sistema financiero y la confianza de los inversionistas. Según el ministro, estos factores consolidan al país como un ejemplo de estabilidad política, social y económica en la región.
