El precio del oro ha alcanzado un nuevo récord histórico, después de que las especulaciones sobre un giro de la Reserva Federal y los riesgos geopolíticos apuntalaran la subida del metal precioso.

El martes, el oro al contado subió hasta un 1.3% y alcanzó un nuevo récord de 2,141.60 dólares la onza, antes de reducir sus ganancias a un 0.6%. Los futuros del oro en EE.UU. registraron un incremento similar, alcanzando un máximo de 2,150,50 dólares la onza y cayendo después a 2,134,80 dólares.

El oro ha subido unos 100 dólares en las últimas cinco sesiones, impulsado por una combinación de expectativas de relajación monetaria, tensiones geopolíticas y el riesgo de un retroceso en los mercados de renta variable.

Aunque el inicio del ciclo de las bajadas de tipos por parte de la Reserva Federal sigue siendo incierto, las señales de que se está acercando el momento, ha apoyado al oro desde mediados de febrero. Los mercados de swaps muestran una probabilidad de casi el 60% de un recorte de tipos en junio, una probabilidad mayor que a principios del mes pasado.

El reciente repunte también ha puesto de manifiesto la creciente desconexión entre los precios al contado y las salidas de fondos cotizados respaldados por lingotes. Las tenencias en SPDR Gold Shares, el mayor ETF de este tipo del mundo, cayeron un 0.3% el lunes, llevando el total al nivel más bajo desde julio de 2019.

Esas salidas han sido compensadas en parte por la persistente demanda de los bancos centrales por el metal precioso, que ayudó a mantener los precios elevados, incluso cuando las tasas de interés reales se dispararon el año pasado. El lingote también recibió apoyo durante el Año Nuevo Lunar, ya que los consumidores chinos buscaron una cobertura contra la agitación del mercado bursátil y el sector inmobiliario del país.

En los primeros meses de este año, el papel del oro como activo refugio se está viendo acentuado por los elevados riesgos geopolíticos, con ataques a buques en el Mar Rojo que ponen de manifiesto la escalada de las tensiones en Oriente Próximo. Los problemas económicos de China y las elecciones presidenciales en EE.UU. a finales de año lo convierten en una mezcla potencialmente volátil.

Redacción: Invertix