Los precios al consumo en Estados Unidos aumentaron menos de lo esperado en abril, lo que sugiere que la inflación reanudó su tendencia a la baja a principios del segundo trimestre, en un impulso a las expectativas del mercado financiero de un recorte de los tipos de interés en septiembre.

El IPC subió a un ritmo anual del 3.4% en abril, frente al 3.5% del mes anterior.

Estas expectativas se vieron reforzadas por otros datos publicados el miércoles, que mostraron que las ventas minoristas se mantuvieron inesperadamente estables el mes pasado, ya que los consumidores, preocupados por la inflación, redujeron sus gastos en tiendas online y concesionarios de automóviles.

Los informes sugirieron que la demanda interna se estaba enfriando, lo que probablemente será bien acogido por los funcionarios del banco central de EE.UU., ya que tratan de diseñar un «aterrizaje suave» para la economía.

Redacción: Invertix