
Economía dominicana mantiene su crecimiento en 2025 pese a la desaceleración global
¿Por qué sigue creciendo la economía dominicana en 2025 a pesar del complicado panorama económico mundial?
En un contexto internacional marcado por tensiones geopolíticas, inflación persistente en economías desarrolladas y desaceleración global, la República Dominicana ha sorprendido con un desempeño económico positivo en 2025. Organismos multilaterales como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional (FMI) proyectan un crecimiento aproximado de 4 %, colocando al país entre las economías de mayor dinamismo en América Latina.
A continuación, se detallan las principales razones detrás de esta resiliencia económica:
1. Diversificación de la economía
Uno de los pilares del crecimiento ha sido la diversificación de la estructura productiva. Aunque el turismo sigue siendo una fuente clave de ingresos, otros sectores como zonas francas, manufactura local, agroindustria, telecomunicaciones y servicios logísticos han ganado protagonismo. Esta expansión multisectorial permite al país reducir su vulnerabilidad ante choques externos.
2. Política monetaria y estabilidad macroeconómica
El Banco Central ha mantenido una política monetaria prudente, con control sobre la inflación y un tipo de cambio estable. La inflación se encuentra dentro del rango meta (4 % ± 1 %), lo que contribuye a preservar el poder adquisitivo de los hogares y refuerza la confianza de los mercados.
3. Reactivación sostenida del turismo
El turismo ha mantenido su tendencia de recuperación, alcanzando cifras récord en llegadas internacionales. Este repunte ha beneficiado sectores como el comercio, la construcción hotelera, el transporte y el empleo informal. Los destinos dominicanos siguen siendo altamente competitivos por su infraestructura, conectividad aérea y percepción de seguridad.
4. Inversión extranjera directa en crecimiento
La inversión extranjera ha continuado fluyendo hacia sectores estratégicos, incluyendo energías renovables, bienes raíces turísticos, manufactura y servicios financieros. Esto se debe a un entorno jurídico estable, seguridad jurídica para los capitales y una ubicación geográfica privilegiada con acceso a mercados clave como EE. UU. y Centroamérica.
5. Expansión del crédito y dinamismo del consumo
La banca nacional ha mostrado solidez, con crecimiento en la cartera de préstamos y acceso al crédito para hogares y empresas. Esto ha dinamizado el consumo interno, el cual sigue siendo un motor importante del crecimiento. Además, el empleo formal ha mostrado mejoras, impulsando la capacidad de consumo de los hogares.
6. Infraestructura y logística en expansión
Proyectos de infraestructura vial, portuaria y aeroportuaria han avanzado en 2025, facilitando el comercio exterior y mejorando la competitividad del país. Asimismo, el sector logístico ha mostrado un crecimiento notable, con proyecciones de que su aporte al PIB aumente a 3.78 % hacia 2034, según estudios del Ministerio de Industria y Comercio.
7. Estabilidad política e institucional
A diferencia de otras economías de la región, la República Dominicana ha mantenido un clima político estable, con reglas claras y continuidad en sus políticas públicas. Esto ha sido clave para sostener la confianza de inversionistas y organismos internacionales.
8. Remesas y apoyo de la diáspora
Las remesas enviadas por dominicanos en el exterior siguen siendo una fuente importante de divisas. En 2025, se mantienen en niveles elevados, lo cual fortalece el ingreso disponible en los hogares y dinamiza el consumo, especialmente en sectores populares y rurales.
9. Agenda de transformación digital y sostenibilidad
El impulso a la transformación digital, la educación financiera y el desarrollo de energías limpias también ha jugado un rol clave. Estos factores no solo modernizan la economía, sino que la alinean con tendencias globales, atrayendo inversiones con enfoque ESG (ambiental, social y de gobernanza).
El crecimiento económico de la República Dominicana en 2025 responde a una combinación de factores estructurales, buena gestión de políticas públicas y un entorno de inversión atractivo. Aunque persisten retos como la informalidad laboral, la desigualdad y la dependencia de sectores sensibles al entorno externo, el país ha sabido posicionarse como uno de los casos de éxito económico en la región.
Redacción: Invertix